Si usted opta por un seguimiento presencial deberá visitar a su médico una o dos veces al año para revisar el dispositivo.
El médico llevará a cabo una interrogación de su marcapasos o desfibrilador mediante un “ordenador” específico denominado “programador” (ver foto) y se procederá a analizar la información almacenada en el dispositivo y realizar los ajustes pertinentes si estos son necesarios.
Obviamente, en los periodos entre seguimientos, su médico no podrá saber que está sucediendo ni con usted ni con su dispositivo.
Hoy, la tecnología nos permite tener información en tiempo real de casi cualquier dispositivo electrónico. Los dispositivos cardiacos no son una excepción y contamos con la mejor y más probada tecnología en seguimiento remoto de dispositivos cardiacos «Home Monitoring».
Si contrata este servicio con nosotros*, su corazón estará monitorizado en todo momento, 24 horas al día, 365 días al año, enviándonos información de cualquier tipo de evento que requiera nuestra intervención vía email o incluso SMS.
Si en cualquier momento el dispositivo detectase una situación que requiera nuestra intervención, le llamaremos por teléfono a usted o a quien nos designe para hacerle venir y examinar “in situ” dicha situación.
Una vez dado de alta en el hospital tras la intervención del marcapasos, desfibrilador o holter inyectable, le entregaremos un dispositivo adicional, el cardioemisor, del tamaño de un teléfono móvil (ver foto), que es el que nos conecta en todo momento con usted y su dispositivo. Puede dejarlo en su mesilla de noche si lo prefiere y cada madrugada nos enviará un estado completo de su dispositivo actualizando así la información que recopilamos de usted día a día.
* Puede que su compañía aseguradora no cubra el seguimiento domiciliario.